El Centro Médico Quirónsalud, situado en los bajos del estadio de Riazor, amplía su cartera de servicios con una nueva unidad asistencial de tratamiento con neurotoxina botulínica tipo A, tanto para su aplicación a nivel estético como terapéutico.
Silvia Murias, médico especialista en Cirugía Plástica y Estética, y responsable de la unidad señala que «Aunque el tratamiento con toxina botulínica para uso estético es el más conocido, desde hace unos años se ha ido convirtiendo en un excelente aliado terapéutico. A nivel estético, es la herramienta más útil para prevenir y tratar las arrugas, así como cambiar la dinámica facial, como por ejemplo elevar las cejas o la punta nasal. Mientras que desde el punto de vista terapéutico y gracias a sus efectos de bloqueo sobre la musculatura estriada, actúa reduciendo el dolor, relajando los músculos y así podemos tratar cada vez más enfermedades para las que no disponíamos de ningún otro tratamiento claramente eficaz.»
Está nueva unidad incorpora los tratamientos más novedosos para el tratamiento de enfermedades como la hiperhidrosis, una sudoración excesiva en axilas, manos y/o pies; el blefaroespasmo, una enfermedad neurológica que provoca un parpadeo continuo e incontrolable, y que puede llegar a ocasionar una ceguera funcional; cefaleas; así como en el alivio del dolor en contracturas musculares como en las torticolis, el latigazo cervical y en el dolor lumbar; entre otros usos terapéuticos.